sábado, 16 de mayo de 2009

Pues pasó que...



Una fria noche de Enero de 1975, ya tarde, propusieron de forma seria crear una compañía de juegos. Había que convertir el sueño en realidad. No es que no surgieran dudas, pero la idea era viable, al fin y al cabo casi todas las empresas jugueteras británicas estaban haciendo productos sin imaginación, a lo sumo variantes mas o menos
logradas del Monopoly.

La idea era tremendamente emocionante y aunque aun no tenían ni idea de como lo iban a hacer funcionar (ni siquiera sabían realmente que es lo que iban a hacer) decidieron que al menos podían pensar un nombre para el negocio y que lo demás iría llegando poco a poco.
Comenzaron lo que se denomina una BrainStorm (tormenta de ideas) de la que surgieron muchas ideas y también nombres. Entre los que se propusieron estaban: "Games Garage", "Galactic Games", "Galaxian Games" o "Megagamic Explosion". Algunos eran descartados entre risas casi al momento. ¿Os podéis imaginar entrando hoy en día en una tienda Megagamic?.

Finalmente y tras la decisión de tomar en principio el camino mas convencional realizando una gama de juegos clásicos, concluyeron que la sugerencia de Steve de "Games Workshop" era la más apropiada, ya que evocaba la imagen de astillas de madera y del trabajo artesano de calidad, además de responder a un estilo muy de moda en los años 70.
En este caso, John era el artista; tenía facilidad para los trabajos de marquetería y aun mantenía fresco en la memoria el recuerdo de unos tableros de backgammon que había visto durante unas recientes vacaciones en Grecia los cuales le habían impresionado gratamente por su estilo y lo cuidado de su elaboración, y si usaba dicho recuerdo como inspiración para sus propios trabajos podía sorprender al público londinense con algo distinto a lo que estaban acostumbrados.

Bien, ya tenían el nombre, tenían la idea y tenían las ganas, ¡todo lo que necesitaban ahora era ponerse en marcha!.

3 comentarios:

  1. Hola, Javi:
    Un saludo ante todo y con muchas ganas de preguntar sobre ésto último que has escrito, pero prefiero no hacerlo y seguir ilustrándome con los nuevos descubrimientos aportados por tí en esta estupenda historia

    ResponderEliminar
  2. Gracias por tus palabras Enrique, la semana que viene seguimos con el origen de Workshop como manufacturadora de juegos de tablero. Sigue atento que tenemos material para rato.

    ResponderEliminar
  3. Hace poco me enteré de que Steve Jackson aún conserva la hoja de papel con las ideas de la Brain Storm de aquella noche en Shepherd's Bush.
    Todo un documento histórico.

    ResponderEliminar