miércoles, 1 de julio de 2009

El Día de los Juegos (2ª parte)


El 20 de Diciembre de 1975 a las 10:00 de la mañana se abrieron las puertas del Seymour Hall para un público expectante.



En aquellos días estaban empezando a proliferar eventos de este tipo, pero aún eran algo relativamente nuevo y la gente no sabía muy bien que esperar.
Varias tiendas de Londres relacionadas con diversos tipos de ocio habían respondido animosamente a la invitación para participar lanzada por Games Workshop y montaron sus propios stands. Junto a ellos podían verse los puestos montados por diversos clubs y asociaciones que buscaban por igual darse a conocer y captar nuevos miembros.
Entre las tiendas que llegarían a convertirse en exhibidores habituales de aquellos primeros Games Day estaban: Waddingtons House of Games, Greenwood & Ball, Games Centre, The London Go Centre, Philmar o Navwar.
En cuanto a los clubs esta era una ocasión de oro para promocionarse y se empezaban a sentar las bases para organizar campeonatos regionales con una multitudinaria final a realizar en futuros eventos de Games Workshop.
Entre los miembros de estos grupos más o menos cohesionados, tenemos muchos ejemplos de voluntarios que dedicaron su tiempo a enseñar a jugar a cualquier persona interesada que pasara por allí. Por nombrar alguno hablaremos de Dave Ross, especialista en Diplomacy en su vertiente por correo.
Paseando entre las diferentes mesas podía uno disfrutar de toda clase de juegos: Wargames de distintos tipos, juegos clásicos de mesa, juegos de fantasía y ciencia/ficción (naturalmente Ian y Steve se aseguraron de que Dungeons & Dragons tuviera un stand bien visible y varias mesas con gente jugando) e incluso juegos familiares, ya que al ser sábado muchas familias aprovechaban el día libre para asistir a un encuentro en el que se podían divertir todos juntos. Además aún no existía una clara diferenciación entre la gran diversidad de juegos y las empresas tendían a meterlo todo en el mismo saco.
Si alguien se cansaba de tanto ajetreo, contaba con un puesto de refrigerios ligeros donde tomar algo entre partida y partida.
Algunas de las mesas estaban dedicadas a un sector más serio y clásico del público asistente con tableros de Ajedrez, Go, Damas, etc. Y resultaba gracioso pasar de esta zona a otra donde los juegos eran de caráter más bien cómico donde los más extrovertidos visitantes podían abandonar por un rato la famosa "flema" británica.
Durante todo el día se celebraron competiciones, junto con sus respectivas entregas de premios y también subastas benéficas, usando material ofrecido por los propios asistentes.

A las 9:00 de la noche aproximadamente se cerraron las puertas de aquel primer Games Day dejando a los exhaustos organizadores con la ardua tarea de recoger y valorar los resultados del día.
Según los medios invitados, como The Times, fue -"La mayor convención de juegos de Gran Bretaña"-. Esto era algo exagerado, ya que según el número 12 de Enero Owl & Weasel se contabilizaron varios cientos de personas pudiendo compararse al Salute de los South London Warlords en el Chelsea Townhall de aquel mismo año, con una asistencia aproximada de 900 personas. Algo modesto para los estándares actuales, pero todo un logro para la época.

Por supuesto Ian y Steve estaban como locos y ni que decir tiene que ya estaban hablando de montar el segundo Games Day al año siguiente, e incluso de organizar otros eventos paralelos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario